Pensamiento Reflexivo
Introducción
Uno de los problemas de tomar decisiones o
elaborar procesos mentales para ello, es siempre no saber pensar. Dentro de
todo un proceso de reflexión o argumentación lógica en lo que se puede inferir,
se resalta como un buen medio para a la toma de acciones efectivas al
denominado por el mismo autor John Dewey. Pensamiento Reflexivo o Mente
Inteligente.
Este concepto enunciado se le otorga
valides efectiva partiendo de su forma de emerger desde lo intelectual o
académico. Son las formas y procesos del conocimiento, por complicado que
parezcan, las que trabajaran con los preconocimientos de los niños en su desarrollo
dentro del la enseñanza-aprendizaje al docente solo le corresponderá formar y
adecuar el pensamiento reflexivo.
El denominado pensamiento reflexivo desde
los argumentos que le sustentan, despiertan la inclinación a admitirlo como el
medio o la forma segura de obrar o de actuar bajo su iluminar mental o de su
guía, fuera de toda duda de error. No se pueden admitir los prejuicios o
pensamientos infundados y tomados por ciertos, salvo por quien los sostiene
como tal. Los asuntos vagos o dudosos tampoco deben tenerse como base de un
pensamiento reflexivo.
En la reflexión Deweyniana se puede
detectar su dominio intelectual con el cual aborda el tema y la relación
racional o lógica, con la cual hace análisis y argumentos de sentido con
razones suficientes que cautivan y convencen de la valides de su
conceptualización e invitan a su asimilación, admisión e introyección.
El pensamiento reflexivo es una buena y
confiable base y guía por los caminos de la vida. Es muy necesario y fundamental
en la existencia misma para no caer en los yerros. Vale méritos el aprender a
reflexionar de manera positiva y objetiva, y para ello nos quiere enseñar el
autor, hay que saberse tomar su tiempo. Saber hacer las relaciones de hechos
como evidencias de los resultados esperados. Sumar siempre la experiencia, es
un buen abonado. Y dará las razones el autor del porqué.
Se encontrarán argumentos lógicos para superar los
pensamientos de prejuicios que tanto perjudican la visión real de las cosas. La
forma de disipar las dudas y de superar los vagos conocimientos. Busca, en
otros términos, llevar a cambiar de ideas, y por ende de prácticas favorables a
forjar una buena vida y forma de vivir.
No queda más que agradecer la dichosa
oportunidad de conocer y reflexionar a la luz de las letras de John Dewey,
sobre la forma de cómo pensar a través de un Pensamiento Reflexivo. Gratitud al
Señor Tutor Raúl Izquierdo Guzmán por la acertada elección y recomendación de
su lectura.
Cuerpo
No podemos decir cómo
debe pensar (Creó que sí). Sin embargo, hay distintas formas de pensar y
razones para otros poder hacerlo mejor. Es decir, se puede mejorar la manera de
pensar, y de alcanzarlo, es de por si un gran logro. Y denomínese para la
utilidad que se quiere resaltar, un pensamiento adecuado a efectivas
operaciones mentales. Una mejora de pensamiento llamado por el mismo
pensamiento reflexivo. Asumir los asuntos seriamente y deduciendo sus
consecuencias (Dewey John, 1998).
Como pensamos es un
proyecto que se debe tener y desarrollar desde las ideas Deweyniana por su
valor basado en sus estudios y en su experiencia como educador y lo comparto en
su esencia y contenido. Sera un buen pensamiento motor de buenos procesos
mentales al ser el producto de una efectiva formación académica. Y es
pensamiento reflexivo por su lugar en el sostén de una inteligencia, y como
fuente de fuerza por sobre vivir (John Dewey).
En Dewey el pensamiento
debe evolucionar y convertirse en una fuerza transformadora de vida y de
esperanza, al abrir otras posibilidades que sustentan una fe el cambio social y
científico, superando todo conformismo y rigidez. La educación, aunque acción
complicada en su formato y temática, debe alcanzar la señalado en condición y
en el resultado indicado como aprendizaje: el pensamiento reflexivo. Más aun, proceso
reflexivo (Cómo pensamos). El hombre es en esencia obrar, y su pensamiento es
su instrumento. Son los pensamientos en el sentido definido los que le
facilitan al hombre ser pragmático en su existencia en todas sus extensiones.
Hay que adherirse a
Dewey en pensar y proponer que el objetivo educativo o meta final, debe ser la
estructuración de la mente, como científica o como reflexiva. Trabando con lo
que los estudiantes desde sus precompresiones poseen en su debido proceso de
desarrollo. Quedando en el maestro la
misión de aportarles a al formación y adecuación de sus mentes de acuerdo a lo
esperado.
En la búsqueda de lo
indicado anteriormente. Se deben superar los prejuicios, en otras palabras, las
ideas preconcebidas. Resultados de sus procesos mentales personales o también
supuestos mentales, fundamentados en lo personal como ciertos. Es imperativo la
búsqueda de la verdad (Pensamiento reflexivo), como fuente de los mejores
momentos, y debe asumirse desde lo intelectual y lo práctico (sin emociones)
(Cómo pensamos).
El pensamiento
reflexivo es de características intelectuales, y en distintas situaciones
implica el como Significa e Indica. Verdad de una indicación cualquiera.
Asegurarse de su realidad. Las pruebas. Concluyendo en una seguridad que justifique
su aceptación (1998)
Una reflexión implica
la evidencia la cual conduce a creer en relación a un referente (se cree o no
se cree) con base en un fundamento del porqué. Así planteado lo anterior, se dirá que el
pensamiento para proceder desde unas acciones demanda de otras acciones (o
realidades) de tal forma que induzcan a las creencias. La reflexión tiende a
develar hechos que sirvan a su propósito (1998)
Cierre
El pensamiento reflexivo es el tipo que se
debe abordar. Los otros tipos son nocivos a la vida en la toma de decisiones, y
son vanos en el tiempo o una perdedera de tiempo sin fundamento. Son ajenos a lo formativo y a lo práctico. Y
es lo que quiere evitar para no errar en los procesos mentales los cuales
requieren de pensamientos adecuados (Cómo pensar)
Permitan decir o agregar lo que pueden demandar
las distintas formas de pensamiento y que es esencial tener presente. El
pensamiento reflexivo permite entre lazar ideas (examen activo), no se puede
actuar precipitada mente o por mera recomendación de otro. El pensamiento
emotivo demanda poder de dominio y claro propósito. El pensamiento de
prejuicios exige indagación, estudio y explicación. Sin embargo, todos pueden
saber tender a unos fundamentos que les sustenten y aúnas conclusiones por
atender, dependiendo de esfuerzos claros, y en conciencia de una estable base de
respaldo empírico o de racionalidad (Cómo pensar)
En la vida se anda entre un camino y otro.
Es muy necesario saber andar buscando razones, indicaciones, signos, señales
que aporten una sugerencia y su reflexión puede conducir al descubrimiento de
acciones que aporten al objetivo. Se pueden conseguir indicios agregados que
pueden ampliar la visión para relacionar situaciones (Cómo pensar)
“La
exigencia de solución de un estado de perplejidad es el factor orientador y
estabilizador de todo el proceso de reflexión.” (1998). “La naturaleza del
problema determina la finalidad del pensamiento, y la finalidad controla el
proceso de pensar.” (1998). Toda conclusión alcanzada debe estar libre de
ambigüedad, de emociones, de dudas. Debe ser adecuada al problema por resolver.
Superar la perplejidad de acuerdo a lo que se emprenda. Siempre se debe
construir un proyecto adicional. Adoptar una teoría que de explicación de la
cuestión. La experiencia permite aportes claros y útiles. Sin experiencias
anteriores, es inútil sugerencias de solución en el presente.
Solo es posible ser reflexivo
cuando se esta dispuesto a soportar el suspenso y continuar en la molesta
búsqueda. Mental mente no se puede ser superpositivo y dogmático, es lo que se
continúa afirmando por el autor (1998). La prueba y el examen no pueden ser
considerados como de inferioridad mental (baja autoestima)
Cuando se hace investigación sobre esa prueba o ese examen, entonces se
convence, entre lo que es un pensamiento reflexivo y pensamiento defectuoso. No
se pueden admitir creencias entre tanto no se hayan encontrado razones que las
justifiquen.
Sino se puede aprender para pensar bien o instruir para pensar bien. Se
puede aprender cómo pensar bien. Que
palabras de buen sentido para tener presentes.
Fuente
Dewey, John. (1998) Cómo
Pensamos. Barcelona. Editorial Paidós.
Comentarios
Publicar un comentario